lunes, 29 de abril de 2019

Psicopatía

Este mismo día estuvimos hablando de la maldad, así que el tema de la psicopatía parece que fue muy acertado para el mismo día. Empezamos viendo un vídeo que me impactó mucho, puesto que trataba de la psicopatía dentro de las parejas.
Este vídeo explicaba las diferentes fases por las que se pasa dentro de una relación con una persona que es psicópata. Las fases son las siguientes:


Según el vídeo la psicopatía no se puede tratar, por lo que puedes haber compartido tu vida con un/a psicópata y no se puede hacer nada para remediarlo. Esto me produjo una sensación de alivio porque no creo haberme encontrado con nadie que lo sea, puesto que, según comentamos, es algo que ocurre con mayor frecuencia de lo que creemos.

Por otro lado, algunas de las personas que asistieron sí que pasaron por algo así y me pareció muy valiente por su parte el hecho de que lo compartiesen con todos, porque es un hecho que, como alguna persona demostró, aunque haya pasado hace tiempo, el dolor no acaba de desaparecer y no es fácil compartir ese dolor con esa valentía.

Después, pensé que esto es muy difícil de identificar, porque nunca puedes saber realmente lo que está sintiendo la otra persona, puede mentirte acerca de si siente remordimiento por algo o no, por lo que la incertidumbre se queda ahí. Por otra parte, esto puede ser un arma de doble filo, puesto que podemos caer en el error de empezar a pensar que todo el mundo tiene una parte de psicópata y eso es algo con lo que hay que tener cuidado.

Tengo que admitir que salí de clase con una sensación un tanto desagradable, puesto que no me imagino estar en una situación así y que, además, haya personas que, además de no poder darse cuenta de ello, se vean juzgadas por la incapacidad de no hacer nada y es que pienso que si fuese tan fácil salir de esa situación, no estarían dentro. Tengo que remarcar una frase que dijo una compañera que me parece bastante esclarecedora:
"Cuando te quieres dar cuenta de lo que está pasando, estás tan enganchada, que no puedes salir."
Marta Martín Galán

sábado, 27 de abril de 2019

Noticia de Notre Dame

La noticia del fuego que tuvo lugar el 15 de abril en la catedral de Notre Dame parece haber conmocionado a todo el mundo, puesto que es el monumento histórico más visitado en Europa. Esta catedral estaba siendo restaurada y estas obras parecen ser las causantes del incendio.

A todos nos ha afectado esta noticia de una forma u otra, puesto que a todos nos parece obra impresionante, incluso con valor sentimental si se relaciona con la película El Jorobado de Notre Dame. Es una pena que haya personas que no vayan a tener la oportunidad de visitar las partes que se han perdido, como es mi caso.

A pesar de que es un hecho que conmociona, siento que hay cosas más importantes por las que sentir pena que por un bien que, al fin y al cabo, es material y que, aunque irrepetible, no es tan necesario. Con esto no estoy queriendo decir que no quiero que se intente recuperar, pero que es un hecho que ya no podemos cambiar y que el mundo necesita seguir, no podemos pararlo por esto y luego seguir con nuestra vida mientras miles de personas mueren por falta de recursos.

Marta Martín Galán

martes, 23 de abril de 2019

Libro "Estas no son las Torres Gemelas"

El libro titulado Estas no son las Torres Gemelas me ha sorprendido bastante porque, a pesar de que soy consciente de que estamos controlados de forma constante por las imágenes que consumimos de forma inconscientemente, no es algo que me suela inquietar.

Parece que hay cosas que son necesarias leerlas para hacerlas, digamos reales. En el libro habla de diferentes terrores que están de forma implícita en nuestra sociedad, como el "terror a no tener una casa como las de las revistas" o el "terror a no tener una segunda residencia". Esto, que parece algo trivial, en realidad es algo que tenemos muy metido dentro porque necesitamos tener un sitio fijo por lo menos para pasar unos días para relajarnos.
El día que vimos en clase el capítulo de My Mad Fat Diary me acordé de uno de los terrores que la autora menciona, de los "terrores que tienen que ver con el cuerpo" puesto que Rae, la protagonista de la serie, siente que todos los carteles que ve la están indicando que tiene que tener una talla determinada y siente el deseo intenso de quemar uno de los carteles en el cual se ve al prototipo de chica que todas "deberíamos ser" para ser perfectas según nuestra sociedad.

Es importante saber a qué estamos sometidos constantemente, por lo que el libro me resulta una buena forma de tomar conciencia de todo esto.

Marta Martín Galán 

viernes, 12 de abril de 2019

Mujeres

12 de abril del 2019

Acudimos a esta conferencia de Isabel Ruiz y nos contó que tiene dos hijos y a la hora de ir a leerles un cuento no encontraba el adecuado, la mayoría hacían referencia a esa princesa que tiene que ser salvada por su príncipe, a hombres valientes y fuertes, a situaciones en las que el hombre siempre estaba por encima de la mujer y esta en segundo plano… 
Por ello Isabel se lanzó en este proyecto tan bonito de crear libros en los que se visibilizaran a las mujeres que han hecho historia pero que no han sido reconocidas hasta que han fallecido. Todos estamos de acuerdo en que, en los libros de texto, me atrevería a decir que el 95% de los personajes históricos son hombres y aparentemente son los únicos que han hecho cosas maravillosas pero la realidad es otra. La realidad es que a las mujeres no les dejaban tener esa visibilidad para sentirse orgullosas de los trabajos y proyectos que habían conseguido. Los méritos siempre se los llevaban los hombres.
Isabel nos contó algunas historias de las mujeres que están incluidas en sus libros y todas me llamaron la atención. Me da rabia que siempre nos cuenten las típicas de hombres y dejen de lado estas que, en mi opinión, son increíbles y merecen ser contadas y reconocidas. Una de las historias que más me impactó fue la de Irene Sendler, una enfermera y trabajadora social polaca católica, que durante la Segunda Guerra Mundial ayudó y salvó a más de dos mil quinientos niños judíos condenados a ser víctimas del Holocausto, arriesgando su propia vida. Esta enfermera sacaba a los niños en ambulancias diciendo que estaban enfermos e incluso en sacos o bolsas de basura. Fue descubierta y condenada a muerte, pero un soldado la salvó y ella, en vez de dejar las cosas estar para seguir a salvo, siguió salvando niños y solo se arrepintió de una cosa, de no salvar a más niños que la necesitaban.
Otra de las historias que más me impactaron fue la de Kasha Jacqueline Nabagesera, una activista LGTB de Uganda, defensora de los derechos LGTB. Ha sido una de las pocas voces públicas de los homosexuales en Uganda, donde la homosexualidad es ilegal y donde se está discutiendo una ley para condenar a muerte a los homosexuales. Ha sido atacada verbal y físicamente en diversas ocasiones y ha sufrido en dos ocasiones una llamada «violación correctiva», para tratar de convertirla en heterosexual.
Y también la de Nellie Bly que dio la vuelta al mundo en 72 días superando el récord de Julio Verne. No contenta con solo superar el récord que también se paró en París para hacerle una entrevista a Verne, quien decía que, si daba la vuelta al mundo en 79 días superándole, la aplaudiría.

Isabel nos hizo una pregunta en la conferencia y era si conocíamos algún pintor, músico, escritor o científico y todos contestamos diciendo dos hombres como mínimo de cada categoría, pero cuando nos preguntó si conocíamos alguna mujer no supimos decir tantas figuras importantes por el simple hecho de que no nos las mencionan en las escuelas. A mí esto siempre me ha hecho reflexionar e Isabel ha conseguido interpretar eso que yo siempre pensaba, escribiendo su colección de libros de mujeres.
Hace tiempo le regalé a mi madre un libro que cuenta 26 historias de mujeres guerreras que cambiaron el mundo y que ahora por fin se les ha dado visibilidad. Me ha recordado mucho a la colección de mujeres porque también cuenta con ilustraciones propias y la historia de cada mujer que ha hecho cosas increíbles.




    


















Cintia Navarro Márquez